56 fotos de mi primer segmento de ruta en Argentina, saliendo del ambiante altiplánica para seguir la famosa Ruta 40.
Regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá, Antofagasta, Chile
Aguas termales donde no hay nadie más. Salares de espectro brillante. Cielos estrellados pura y reveladora. Volcanes a veces fumando. Llamas, vicuñas, alpacas, vizcachas, flamencos, ñandúes. Pueblos sin alma, abandonados o escasamente pobladas. Montañas intercaladas que limitan la vista infinita del Altiplano sin árboles. Caminos de arena, otros perfectamente pavimentados, y todo lo que hay entre los dos. La generosidad de las pocas personas encontradas.
Es la Ruta Andina, una carretera chilena que sigue la frontera con Bolivia, que fue mi desafío de introducción en el decimocuarto país del recorrido. Diez días de relativa soledad, en el que debe asegurarse de llevar suficiente comida y hacer buenas reservas de agua cuando sea posible. Hay sólo en Colchane y Ollagüe (ver mapa al final del artículo) donde se puede encontrar productos básicos, teniendo en cuenta de que la tienda está abierta. En Colchane, tuve que ir al restaurante del hotel para negociar pan y latas de atún. Continuer la lecture
Arica y Parinacota, Tarapacá and Antofagasta regions, Chile
Thermal sources where nobody’s there. Salt basins with dazzling spectrum. Pure and revealing starry sky. Sometimes fuming volcanoes. Llamas, vicugnas, alpacas, viscachas, flamingos, rhea birds. Abandoned or little populated ghost towns. Scattered mountains limiting the infinite view of treeless Altiplano. Sandy roads, other perfectly paved, and everything in between. Generosity from the few people met.
It’s the Ruta Andina, a Chilean road following the Bolivian border, which was my welcoming challenge in the fourteenth country of this route. Ten days of relative solitude, where it’s needed to bring enough food and make enough water reserves when it’s possible. There were only in Colchane and Ollagüe (see the map at the end of the blogpost) where you can find basic food products, considering that the shop is open. In Colchane, I had to go to the hotel with a restaurant to negotiate bread and tuna cans. Continuer la lecture